Cuando pienso en nuestro futuro, nuestra casa, nuestro perro, nuestros hijos.
O en las pequeñas cosas, "aquella" mirada, tus bromas, nuestros motes.
Se que tu ausencia es a causa de mis errores. Y no te lo reconozco, porque tengo miedo de que no me perdones. Asi que te lo niego todo y te digo que no es culpa de nadie.
A veces no deseo nada mas en este mundo que volver a abrazarte. Pero tengo miedo: de que me rechaces o de que me devuelvas el abrazo. Miedo de equivocarme si me quedo quieta o si me muevo demasiado. Tengo miedo de todo porque no tengo la certeza de nada, y arriesgarme, ya lo he visto, es peligroso. Y equivocarse, catastrofico.